Cómo moldear una cara con arcilla

Hay cientos de maneras de hacer una cara. Esto es sólo una forma de trabajar. Así que no tengas miedo de experimentar. Y siempre recuerda, si no te gusta la forma en que resulta simplemente amasa la arcilla y empieza de nuevo (hay un cierto grado de satisfacción cuando se aplasta un proyecto particularmente problemático).

Rueda la arcilla en una bola, y presiónala sobre una baldosa de cerámica. Es bueno trabajar sobre cerámica ya que ayuda a mantener la arcilla fría (se puede volver pegajosa si está demasiado caliente) y cuando terminas el proyecto se puede meter en el horno todo junto, la arcilla y la cerámica.

Con los dedos, presiona la arcilla (en el punto intermedio o un poco por encima de la mitad de la cara) para crear los ojos.

Amasa un pequeño cono para la nariz, y luego apriétalo en un largo triángulo. Coloca esta figura entre los ojos con dos pequeñas bolas de arcilla a cada lado.

Usa los dedos y una herramienta de modelado de arcilla (puedes improvisar con otro elemento si no tienes las herramientas necesarias) para empujar la arcilla alrededor y difuminar los bordes, conectando las diferentes partes sin problemas.

Marca donde será la boca.

Con un poco de arcilla, forma un triángulo con una parte superior redondeada que se convertirá en el labio superior. Presiona el borde superior de modo que es más delgado que el borde inferior para que sea más fácil de unirlo a la nariz y las mejillas. Colócalo debajo de la nariz.

Usando la herramienta de arcilla, difumina la parte superior de la forma en la nariz y las mejillas. Presiona en el centro, debajo de la nariz para crear una caída. Ahora presiona hacia arriba desde la parte inferior (este es el lado más grueso) en dos lugares para hacer el labio superior.

Amasa un pequeño óvalo para el labio inferior y colócalo en su lugar. Si es demasiado grande no te preocupes. Puedes quitar un poco del exceso de arcilla después.

Difunde el borde inferior sobre el resto de la cara. No hagas nada en el borde superior.

Estira tres pequeñas bolas de arcilla, una más pequeña que las otras dos. Pulsa la bola más pequeña en la barbilla y las dos bolas de igual tamaño en las mejillas. Presiona hasta que se parecen más a discos, en lugar de pelotas.

Difunde los bordes. Dos bolas pequeñas de arcilla son los ojos. Mueve las piezas aquí y allá para experimentar. Te sorprenderás de ver cómo un milímetro puede alterar la expresión de un rostro. Cuando estés satisfecho con la apariencia, presiona suavemente sobre la arcilla para asegurarlas y obtener un buen contacto entre las partes.

Moldea una bola un poco más grande y presiónala hasta que es un disco delgado en la cerámica. Dibuja una línea de corte por la mitad con un instrumento afilado (alfiler, un cuchillo artesanal). Con mucho cuidado, levanta las mitades separadas de la baldosa y coloca una sobre cada ojo para hacer los párpados.

Esta parte es difícil porque requiere varios intentos antes de que puedas quitar la arcilla de la baldosa sin distorsionarla. A veces, espera unos minutos a que se enfríe la arcilla. Difunde los párpados en la parte superior.

Estira dos pequeñas serpientes y colócalas debajo de cada ojo. Empújalas en una curva para seguir la forma del ojo. Difunde en las partes bajas de las formas para hacer los párpados inferiores.

Con los dedos y la herramienta de moldeo se puede empujar y dar forma a la arcilla para hacer los cambios que desees, luego enciende el horno de acuerdo a las instrucciones en el paquete de arcilla (diferentes fabricantes tienen un poquitito diferentes temperaturas de cocción).

Imagen paso a paso

Imagen paso a paso

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